Julius Blum GmbH, Beschlaegefabrik

6 6 Blum Inspirations Así como antes era habitual que var ias generaciones convivieran bajo un mismo techo, hoy en día, el modelo de la familia grande está perdiendo cada vez más peso, y esto repercute en las expectativas de las personas sobre su vida en la vejez. En la actualidad, la mayoría de las personas prefiere continuar viviendo en su propio hogar. Opor tunidades y retos El arraigo es bueno para el cuerpo y el alma. Al envejecer en el hogar propio, se permanece en un entorno familiar y dentro del círculo social conocido. Lo ideal es que haya un vínculo cercano con la familia para que las hijas e hijos ya crecidos tengan la cer teza de que no les falta nada a sus padres. En función del estado físico, puede ser útil llevar a cabo cier tas reformas para simplificar la vida diar ia, por ejemplo, en la cocina o el cuar to de baño. Sin embargo, si se actúa de forma ra zonable, se aceptan los cambios y se planifica con tiempo, la transición puede resultar muy sencilla. Un hogar que madura con sus habitantes En la juventud, es difícil imaginarse las limitaciones que pueden llegar con la edad. Por ejemplo, los sentidos pueden empezar a fallar. Movimientos que antes se llevaban a cabo sin esfuer zo pueden conver tirse en exigentes retos. El hogar y su mobiliar io deben adaptarse a estos cambios condicionados por la edad. «La mayoría de las personas se da cuenta demasiado tarde de que su hogar actual no cumple con los requisitos para vivir de manera independiente en la vejez», afirma Lothar Mar x, arquitecto de viviendas par ticulares y sociales. «Al construir el hogar se debe tener presente el tema de la accesibilidad». La construcción accesible para personas mayores y con discapacidad es el ámbito de especialización del catedrático honorar io de la Universidad Técnica de Múnich. Diseño Universal El concepto del «Diseño Universal» (Universal Design) está ganando cada vez más popular idad. Crea soluciones «A l const rui r y amueblar un piso o una casa, la f uncional idad debe ser siempre la máx ima pr ior idad. El d iseño puede mod i ficarse si es necesar io. Pero la falta de f uncional idad es d i f íci l de solucionar». Lothar Mar x, arquitecto y catedrático honorar io de la Universidad Técnica de Múnich

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